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Una causa del reflujo ácido es una hernia hiatal, que hace que la parte superior del estómago se mueva por encima del diafragma. Otras causas incluyen las bebidas gaseosas, el sobrepeso, el tabaquismo, el embarazo y acostarse después de comer grandes comidas.
Si una persona experimenta síntomas del reflujo gástrico más de dos veces a la semana, es probable que tenga la enfermedad del reflujo.
Durante la deglución, la válvula entre el estómago y el esófago se abre y se cierra después de que la comida entre en el estómago. Si esta válvula se debilita o se relaja anormalmente, el ácido del estómago fluye de nuevo hacia el esófago, causando acidez.
El revestimiento del esófago luego se desgasta con el tiempo, causando estrechamiento esofágico y sangrado.
Las bebidas carbonatadas causan una mayor presión en el estómago, promoviendo el reflujo ácido. Además, el chocolate es alto en cacao, grasa y estimulantes como la teobromina y la cafeína, que aumentan el riesgo de esta condición.
Los factores de riesgo incluyen la obesidad, la diabetes, el asma y los trastornos como la esclerodermia.
Los síntomas del reflujo ácido incluyen ardor de estómago, náuseas, pérdida de peso, tos y regurgitación, que es acidez en la garganta o la boca.
Los tratamientos incluyen evitar usar ropa apretada, comer comidas pequeñas varias veces al día, dejar de fumar y perder peso a través de dietas saludables y ejercicio.
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Los pacientes también deben informar al médico acerca de los medicamentos que están tomando para determinar si podrían estar causando síntomas de reflujo ácido.